
La historia, corta historia de Gary Medel, cuenta que a los 17 años fue padre de gemelos: su novia, ¡de 14!, dio a luz a Gary jr. y Alejandro. Rápido y certero, el polifuncional futbolista revalidó el nombre de pila con el que lo bautizaron un año después de que el inglés Gary Lineker se consagrara goleador de México 86. Con una espectacular chilena (ooobvio) y una definición con la frialdad de cualquier buen nueve de área (pecho y adentro), le dio varios tubos de oxígeno al equipo de Bielsa.
Es cierto: Chile ostenta el mejor rendimiento entre selecciones sudamericanas en la altura de La Paz (2-1-1 en las últimas cuatro Eliminatorias) y por cuestiones geográficas, se trata del que menos siente la falta de aire. Aunque el Loco no tentó al destino: sus futbolistas realizaron una preparación de siete días en cámaras hiperbáricas. Pero todo esto no debe desmerecer lo que anoche fue un triunfazo. Jugó un muy buen primer tiempo (Alexis Sánchez estuvo dos veces muy cerca de convertir y Suazo, otra) y se le plantó a Bolivia con audacia para lastimar y eficiencia (con Fuentes como estandarte) para anticipar. Y Bielsa, el criticado Bielsa, el que mantiene una mala relación con la prensa, terminó mostrando los dientes: la victoria ubicó a la Roja en la misma línea que Venezuela (la del repechaje), a quien visitará este jueves...
No fue un paseo. Claro que no. Porque Bolivia, aunque se defienda muy mal, conoce su libreto en La Paz: buscar con pelotas paradas y remates de media distancia. La Roja se lo impidió con seguridad aérea (las dos veces que Moreno cabeceó, lo hizo incómodo) y con sus hombres raspándose buena parte del segundo tiempo para impedir derechazos y zurdazos. Hubo, entonces, 20 ó 30 minutos de ahogo y dominio territorial del local. Ni más ni menos.
Hasta que Medel, un polifuncional (puede jugar en cualquier puesto del fondo o del medio) cerró su doblete. Igual que hace cuatro años... Grande, pá.
lunes, 16 de junio de 2008
Con los dientes apretados
Etiquetas: Bolivia - Chile



