lunes, 8 de septiembre de 2008

Lula-mento


Chile tiene una muy buena oportunidad de vencer. Bielsa le ha causado muchos problemas a Brasil cuando dirigía a Argentina". "Brasil no está jugando un fútbol brasileño... Es un juego precavido, cuidadoso, sin riesgos, poco bonito". Los que avisan, los que imaginan, los que anuncian que esta noche la Roja podría dejarle a Dunga un segundo ojo morado son Zico y Sócrates, cracks verdeamarelhos hoy subidos a la moda de pegarle al técnico del Scratch. Los roles asoman invertidos, con los riesgos que esto implica: Chile es candidato ante Brasil. Aunque su arquero ataje en la Segunda de España y su defensa juegue íntegramente en el fútbol local. Juegan a las 22, en Santiago, y televisa TyC Sports.

"Brasil es un rival accesible, no imposible", avisó el Loco en su único contacto con la prensa, y la frase envalentonó a los hinchas trasandinos, que agotaron las entradas. "Pero centrar la atención en las falencias o problemas que trae el rival puede hacer que perdamos de vista sus virtudes", aclaró el rosarino, que encara un choque clave: de ganarle a Brasil, le sacaría cuatro puntos de ventaja, hasta pasaría a (upa) Argentina en la tabla y sacudiría aún más el ya bastante cascoteado rancho de Dunga, criticado hasta por el propio presidente Lula y a quien le llueven pedidos de renuncia tras el 3-0 con baile que el equipo de Batista le dio en las semifinales de los Juegos.

Con seis de los titulares con pasado en el Colo Colo tetracampeón de Borghi, Chile apuesta a profundizar la crisis de Brasil. En la práctica de ayer, Dunga se paró en la barrera mientras Ronaldinho ensayaba tiros libres. Qué ganas de seguir ligando golpes...