Fiel a sus pensamientos, Bielsa mandó su equipo al frente y así terminó una Eliminatoria que ya entró en la historia del fútbol chileno. Con gol de Humberto Suazo le ganó a Ecuador por 1 a 0 y ahora espera por el partido de Paraguay para saber si finaliza por primera vez en segundo lugar. En el final el Loco se emocionó, saludó a la gente y agradeció al cielo.
Si alguien pensó que la Selección de Chile no iba a salir a ganar, es porque no conocen a su entrenador. Si el Loco hubiese visto en algún momento que su equipo no iba al frente, sin dudas hubiese presentado la renuncia. Es por eso que la Roja no hizo más que confirmar lo que insinuó a lo largo de todas las Eliminatorias. Salió a aplastar a su rival, quiso desde el primer minuto festejar la clasificación con una victoria y por eso tuvo su premio. Enfrente estuvo Ecuador. Un equipo muy timorato, que perdió su gran chance la semana pasada en Quito ante Uruguay y llegó a Santiago de Chile con la guardia muy baja. Nunca se sintió protagonista del partido y apenas si tuvo unos diez minutos sobre el cierre de la primera parte, donde arrimó algo de peligro al arco de Bravo.
Suazo metió en la primera pelota que tuvo en la segunda parte, todo lo que desperdició en los primeros 45 minutos y desde ahí no hubo más partido. La Roja siguió yendo, como siempre, y si no estiró la diferencia fue por algún individualismo de sus delanteros que quisieron terminar las Eliminatorias con un gol. Ecuador intentó reaccionar y tuvo un par de chances, pero hubiese resultado injusto que con un planteo tan conservador, se hubiese llevado algo de Santiago.
Chile terminó una Eliminatoria histórica. Puede quedarse con el segundo puesto y su gente se ilusiona con otra actuación histórica en Sudáfrica. Bielsa pide calma, pero de algo pueden estar seguros los chilenos, su Selección jamás jugará un partido esperando que el azar determine el resultado. La Roja de Bielsa siempre ira en busca de su propio destino y eso ya transforma su ciclo en histórico.